miércoles, 8 de septiembre de 2010

Sobre Lope de Vega

Anoche Emma y yo fuimos al cine para ver Lope (2010), película medio española medio brasileña dirigida por Andrucha Waddington. Nos gustó mucho la imagen del escritor que desprendía Alberto Ammann, la ambientación del Madrid del Siglo de Oro, el vestuario, la fotografía y la música (os aconsejo que esperéis a los créditos finales, que llevan de fondo un poema musicado de Lope en la voz de Jorge Drexler).
La película comienza con el regreso de Lope de Vega a Madrid; en 1583 se había alistado en la marina y participó en la batalla de la isla Terceira (Azores), regresando ahora a la ciudad tan pobre y desordenado como se había ido. Trabajaba poco y mal debido sobre todo a las continuas relaciones amorosas. Conoce entonces a Elena Osorio, su primer amor (la "Filis" de sus poemas, que en la película es Pilar López de Ayala), y Lope terminará escribiendo sus primeras comedias para la compañía del padre de su amada, el empresario teatral Jerónimo Velázquez. En 1587 Elena se casó por conveniencia y despechado Lope de Vega hizo circular contra ella y su familia unos versos muy duros, por lo que le llevan a juicio y le envían a la cárcel (Lope recordaría años más tarde sus amores con Elena Osorio en La Dorotea). Finalmente le desterrarán ocho años de la Corte, con amenaza de pena de muerte si desobedecía la sentencia. En este tiempo ya se había enamorado de Isabel de Alderete y Urbina, con quien se casó en 1588, tras raptarla con su consentimiento (la "Belisa" de sus versos, interpretada por Leonor Watling).
Aquí termina la película. Sólo ha recogido unos cinco años de la vida del gran Lope de Vega. De familia humilde, se casó dos veces y tuvo una vida amorosa muy intensa manteniendo relaciones con numerosas mujeres; fue padre de varios hijos e incluso llegó a ordenarse sacerdote. Murió con 73 años y muchos investigadores creen que dejó escritos tres mil sonetos, varios centenares de obras de teatro, tres novelas, cuatro novelas cortas y tres poemas didácticos (o al menos se le atribuyen).
Aunque es verdad que sabe a poco y se queda algo corta, la película es buena. Merece mucho la pena dejarse llevar al Madrid de finales del siglo XVI e intentar saber cómo pudo vivir Lope de Vega, de dónde nacían sus versos y contextualizar en imágenes nuestra literatura más áurea.