domingo, 1 de noviembre de 2009

Ruta de Machado en Soria

Dos días hemos estado siguiendo las huellas de Antonio Machado en Soria. Cincuenta alumnos y tres profesores (Nieves y Emilio han sido imprescindibles) evocando las lacónicas palabras de aquel gran hombre, bueno y honesto y triste hasta el extremo.
Las tierras sorianas y Emma nos han recibido con unos días azules y un sol muy luminoso que siempre, en esta época, tiende a enfriarse; excepto este año. El paseo del Mirón, Santo Domingo, el Instituto Machado (con su director Ángel), Santa María la Mayor, la Audiencia, el Collao, la Dehesa, el olmo y el Espino, la tumba de Leonor, los Arcos de San Juan, el camino entre San Polo y San Saturio,... Después Valdeavellano de Tera, Numancia, la Laguna Negra y las Edades del Hombre.
Regresamos el sábado de madrugada y el viajero, aunque cansado, viene fortalecido y con entusiasmo verdadero. Mañana en la aulas no se hablará de otra cosa. Y afortunadamente el nombre de don Antonio rebotará de nuevo, lleno de vida, por poemas perdidos, pupitres y pizarras.