viernes, 31 de diciembre de 2010
miércoles, 8 de diciembre de 2010
Elogio de la lectura y la ficción
miércoles, 24 de noviembre de 2010
¡Por fin!
martes, 23 de noviembre de 2010
Aitana Alberti en Cáceres
jueves, 18 de noviembre de 2010
Acuse de recibo 2
martes, 16 de noviembre de 2010
Acuse de recibo
domingo, 14 de noviembre de 2010
Belén Esteban en Cáceres Pop-Art
jueves, 11 de noviembre de 2010
Pérez Azaústre, Premio Loewe 2010
me han curvado la espalda los enanos
que he venido cargando desde siempre,
los que duermen la siesta en mis bolsillos
para ralentizar mi digestión.
Aún es pronto para volver a casa,
aunque pisé los límites.
Pensé que nadie más podría reconocerme.
Escuché los ladridos, temí el polvo naranja.
Recordé la alcancía oculta bajo el mueble.
¿Qué ha sido del nervio, el escondite
bajo un muslo de reina y el metal de unas manos?
Ahora los disfraces son de piel
y miro la avenida desde lejos, ya muy lejos
del sol y de los otros,
que alguna vez volaron para aplacar mi fiebre.
Sé lo que estás pensando: aún es pronto,
y casi no he cumplido mis pactos con la vida.
Es muy pronto aún, pero qué esperas,
si tu voz se me clava en los tobillos
y me amansa la angustia, el temor de un insomnio.
Dentro, en mí, habitas aún la casa.
Otros vinieron antes, y ya la vaciaron
de ti, de tus vestidos grandes, de tus plantas vivaces
a las que siempre hablabas de mí, entre otras cosas.
miércoles, 10 de noviembre de 2010
Tan cerca del aire
"Con su maestría habitual, Gustavo Martín Garzo nos regala una conmovedora novela sobre la importancia de vivir la fantasía y soñar la realidad, sobre el placer de contar historias y el coraje necesario para formar parte de ellas y hacer nuestras sus promesas", explica el texto de la contraportada. Un largo y precioso cuento que parte del mundo rural, de la naturaleza, donde lo onírico se mezcla con la dureza de la vida. Un muchacho apesadumbrado en cuyas reflexiones nos escuchamos a nosotros mismos y que sólo es feliz cuando se encuentra más cerca del aire en compañía de las garzas reales que de la tierra. Un hermosa fábula que nadie debe perderse, dedicada a Ana María Matute y que desde el comienzo nos pellizca el corazón: "Si hubiera un lugar donde se cumplieran todos los deseos, nadie querría ir por temor a descubrir los suyos".
viernes, 5 de noviembre de 2010
Manifiesto por la libertad de expresión y en favor de Fernando Sánchez Dragó
martes, 2 de noviembre de 2010
2 de noviembre
sábado, 30 de octubre de 2010
Homenaje
pintada está mi casa
del color de las grandes
pasiones y desgracias.
Regresará del llanto
adonde fue llevada
con su desierta mesa,
con su ruinosa cama.
Florecerán los besos
sobre las almohadas.
Y en torno de los cuerpos
elevará la sábana
su intensa enredadera
nocturna, perfumada.
El odio se amortigua
detrás de la ventana.
Será la garra suave.
Dejadme la esperanza.
domingo, 24 de octubre de 2010
Felicidades otra vez
Ya tiene muchos años
y tal vez no ha cumplido su destino.
Nunca buscó la guerra, pero todas
las batallas más tristes
pasaron por la puerta de su casa.
Casi siempre ha perdido, y cuando los ejércitos
que decían luchar por sus ideas
gozaron la victoria,
comprendió los motivos
de su desconfianza.
Comprendía también que los sueños se pierden
y cambian de finales.
No quiso mendigar
delante del amor o de la muerte,
para que la limosna no manchase su orgullo.
Es el orgullo seco un último refugio
de aquellos que conservan sus razones
después de haber perdido la esperanza.
Cuando sentada en el vagón del metro
ve llegar a la historia repleta de promesas,
triunfos, medallones y bolsas del mercado,
se suele levantar para dejarle asiento.
Es muy vieja la historia que se viste de joven,
tan vieja como ella,
y ni siquiera sabe dar las gracias.
Educada la mira, se aparta y le murmura
siéntese usted, señora,
yo me bajo en la próxima estación.
-
(Poema inédito que leyó García Montero
con motivo de la entrega del premio)
miércoles, 20 de octubre de 2010
Miguel Moreno
Leo ahora en la prensa digital algunas cosas... Nacido en el pueblo soriano de Velamazán en 1927, ha ejercido de maestro y periodista (por el ingenio de su lenguaje se le bautizó como "Quevedo soriano") y, en su dilatada carrera profesional, fue director del periódico Campo Soriano y contribuyó a la puesta en marcha de las jornadas rito-gastronómicas de las matanzas del Virrey Palafox en El Burgo de Osma. Ha sido Cronista oficial de la ciudad de Soria durante los últimos 26 años e hijo adoptivo de la misma desde principios de la década de los noventa. Miembro titular del Centro de Estudios Sorianos (CES), era además Cronista oficial de Ágreda, San Pedro Manrique y Navaleno, y tenía en su poder el título de Soriano del Año (1987) y Comendador de la Orden Civil del Mérito Agrícola; además estaba en posesión de la Orden de Alfonso X el Sabio y en 1990 fue nombrado Caballero de Turismo de Castilla y León.
domingo, 17 de octubre de 2010
Exposiciones literarias
"Dalí, Lorca y La Residencia de Estudiantes" se ha montado en el edificio de CaixaForum. Ocupa prácticamente la tercera planta y ha querido recoger la relación artística, literaria y sentimental que surgió entre los dos artistas desde 1923 a 1929. "Ha querido" porque es humanamente imposible reunir todo el material que nació en estos seis años de convivencia. Exposición no obstante rica y variada (aunque ningún material novedoso) que aporta al visitante mucha y buena información sobre lo que lograron hacer entre ambos. La etapa daliniana en la literatura de Lorca y la influencia lorquiana en la pintura de Dalí. Surrealismo, putrefactos, cartas y dedicatorias, cuadros, marionetas, varios "San Sebastianes" y numerosos libros y revistas. Muy recomendable.
"Miguel Hernández. La sombra vencida" es la que más le ha gustado a Emma. Desde la Biblioteca Nacional se celebran los cien años del poeta de Orihuela, el pobre cabrero que llegó a este mismo edificio en los años treinta y donde no le recibieron ni con aplausos ni con abrazos. El profesor José Carlos Rovira ha coordinado con gusto y sabiduría esta exposición, digna y completa. Recorrido histórico y vital a través de libros, fotos, objetos personales, manuscritos y varios cuadros importantes entre los que destaco los de Benjamín Palencia y Maruja Mallo y el famoso carboncillo que dibujó Buero Vallejo retratando al poeta en la compartida prisión de Torrijos. Me quedo con tres objetos de Miguel Hernández: su maleta (vacía como siempre), una lechera (donde Josefina le llevaba leche a la cárcel y en la que sacaba poemas escondidos) y el papel higiénico en el que Miguel escribió cuatro cuentos a su hijo. El catálogo que recoge la totalidad de lo expuesto es excelente. Creo que es un buen punto y final para las celebraciones de este año hernandiano.
Me sigue sorprendiendo y emocionando a partes iguales la riqueza desbordada de los años 20 y 30 de la cultura española, lo que nos sigue aportando y lo que ciertamente sigue enseñándonos. Años irrepetibles, únicos, que tardarán mucho tiempo en nacer, si es que nacen...
sábado, 9 de octubre de 2010
Yo soy mi infancia
jueves, 7 de octubre de 2010
Mario Vargas Llosa, Premio Nobel de Literatura 2010
jueves, 30 de septiembre de 2010
No pudo ser...
viernes, 17 de septiembre de 2010
El Cementerio Nuclear no se queda en Extremadura
lunes, 13 de septiembre de 2010
Almudena Grandes y sus episodios nacionales
II. El lector de Julio Verne. La guerrilla de Cencerro y el Trienio del Terror, Jaén, Sierra Sur, 1947-1949.
III. Las tres bodas de Manolita. El cura de Porlier, el Patronato de Redención de Penas y el nacimiento de la resistencia clandestina contra el franquismo, Madrid, 1940-1950.
IV. Los pacientes del doctor García. El fin de la esperanza y la red de evasión de jerarcas nazis dirigida por Clara Stauffer, Madrid-Buenos Aires, 1945-1954.
V. La madre de Frankenstein. Agonía y muerte de Aurora Rodríguez Carballeira en el apogeo de la España nacionalcatólica, Manicomio de Ciempozuelos (Madrid), 1955-1956.
VI. Mariano en el Bidasoa. Los topos de larga duración, la emigración económica interior y los 25 años de paz, Castuera (Badajoz) – Eibar (Guipúzcoa), 1939-1964.
miércoles, 8 de septiembre de 2010
Sobre Lope de Vega
miércoles, 1 de septiembre de 2010
jueves, 19 de agosto de 2010
"Encuentros en Montánchez" (V edición)
jueves, 24 de junio de 2010
De antologías
domingo, 20 de junio de 2010
viernes, 18 de junio de 2010
Saramago eternamente
que los días vividos aproximen
el vaso de agua amarga colocado
donde la sed de vida se exaspera.
fue hoy cuando nacimos. Sólo ahora
la vida comenzó, y, lejos aún,
la muerte ha de cansarse en nuestra espera.
domingo, 13 de junio de 2010
En el camino
martes, 8 de junio de 2010
Estoy leyendo...
Cuando tanto prometía,
del alba a la madrugada,
un día sí y otro día,
la vida se queda en nada.
La vida se queda en nada
y de aquel sol que lucía
sólo su brillo de espada
alumbra la vida mía.
La vida se queda en nada.
viernes, 4 de junio de 2010
Helga de Alvear
miércoles, 2 de junio de 2010
Enorme y triste decepción
sábado, 29 de mayo de 2010
De todo hace casi veinte años
miércoles, 26 de mayo de 2010
Nuevos diarios de Carlos Morla Lynch
domingo, 23 de mayo de 2010
Estoy leyendo...
jueves, 20 de mayo de 2010
Libros del 27
viernes, 14 de mayo de 2010
Vergüenza
lunes, 10 de mayo de 2010
Contra viento y marea
jueves, 6 de mayo de 2010
Estoy leyendo...
de abandonar los nombres,
porque el nombre es razón de los ausentes,
y nosotros estamos en la luz,
en el aire que corta
las dulces siluetas,
en el tiempo que ordena las palabras
y en los escalofríos del jardín.
Incluso en la memoria que quiso ser presente.
y volverán los nombres a los labios.
la luz cuando te vayas.
Recuérdame, lector,
al doblar esta página.
martes, 27 de abril de 2010
Los asesinos lentos
En 2007 publicó el libro Crímenes triviales compuesto por cinco relatos; estuvo en el cajón durante bastante tiempo hasta que el escritor Manuel Moyano (que según Balanzá fue su descubridor literario) le convenció para que lo moviera por las editoriales. Él aseguraba que eran impresionantes, buenísimos y afortunadamente el autor le hizo caso. Tuvo una tirada limitada pero los relatos fueron muy bien acogidos por la crítica.
Corrector en otro tiempo y hoy escritor 24 horas al día, Rafael Balanzá es el nuevo Premio de Novela Café Gijón con Los asesinos lentos, su primera novela, una reflexión literaria «sobre los miedos de la vida».
Los asesinos lentos es un magnífico relato psicológico de dos hombres: Juan Cáceres, casado con una mujer de éxito, con hijos, un hermoso chalet, un velero y un negocio propio; y Valle, un antiguo amigo músico que no ha logrado triunfar en la vida, que está divorciado, bebe más de la cuenta y considera que su vida es un fracaso.
Al comienzo de la novela, Valle contacta con Juan después de diez años sin verse; ambos tienen un pasado en común. Cuando eran jóvenes habían formado una banda musical que si bien no triunfó, logró que tuvieran éxito con las chicas. Mientras Valle continuaba con su carrera musical, Juan la abandonó para buscar un trabajo más seguro. Ahora se vuelven a encontrar. Así comienza la novela:
"Estuve charlando con Valle en el café Arrecife; durante una hora larga evocamos juntos otros tiempos, reímos juntos; después me anunció fría y serenamente que iba a matarme, que había decidido matarme y que lo haría relativamente pronto".
Primeras palabras contundentes con tintes cinematográficos y ecos claros de la famosa Crónica de una muerte anunciada de García Márquez.
Juan al principio considera todo esto una broma pero su amigo le va desgranando las razones por las que planea matarle, razones que él considera absurdas. Es el planteamiento de Los asesinos lentos. Dos hombres. Uno un triunfador en la vida, el otro un perdedor. El anuncio de un asesinato. Una vida que no es perfecta.
Gran acierto ha sido poner en la voz de Juan Cáceres los sucesos que se narran en el libro. A través de él vemos cómo su vida, aparentemente perfecta, se va desmigajando y va encontrando elementos que le llevan a replantearse cómo es su familia en realidad, a la vez que intenta convencer a su amigo de que matarlo no es una buena idea. Narrado en primera persona, leemos sus pensamientos, cómo es su vida cotidiana, su trabajo en su tienda de animales en un centro comercial, cómo se relaciona con su mujer, con sus hijos o con sus amigos.
Rafael Balanzá tiene poco más de 150 páginas para resolver esta historia sin defraudar a los lectores; entiende que hay una clara injusticia al comparar las trayectorias vitales de los dos amigos. Ese encuentro entre Juan Cáceres y Valle (en cuyo nombre veo un guiño al maestro del esperpento), llevará al protagonista a vivir angustiado, viéndose inmerso en un proceso de pérdida de la realidad que lo abocará a un final trágico. La vida de Juan, al que en teoría le va todo bien, se empieza a pudrir; su familia y su negocio le traen problemas que uno a uno son digeribles pero que todos juntos, unidos al anuncio de que su amigo lo va a matar, lo llevan a la enajenación y la locura.
Usando un estilo directo, preciso y depurado y la capacidad sugestiva y evocadora del lenguaje, del humor y la ironía, nuestro escritor rompe la frontera de lo verosímil planteando situaciones surrealistas y absurdas que, desde la angustia, se viven con pesadumbre. El protagonista tergiversa, exagera, esperpentiza a los personajes y se hunde en sus miedos más inmediatos. A los lectores, con una intriga que se va haciendo desesperante, consigue contagiarnos la locura de Juan Cáceres y alejarnos de la razón. Nos convence. Nos llena de desasosiego.
Lo escalofriante es que llegamos incluso a pesar que nuestra vida, ordenada y feliz, se puede derrumbar en cualquier momento sin necesidad de que ocurra nada extraordinario. Que yo, que me considero un hombre equilibrado, puedo perder el juicio en un par de días. En un momento de la novela (pág. 105) hay una reflexión que me parece imprescindible reseñar:
"Existe una determinada y posible combinación de circunstancias para arrastrar a cada hombre a su propia y particular forma de locura; y nadie, por sólidamente constituido que esté su carácter, se encuentra completamente a salvo de eso. Nadie".
Balanzá hace un magnífico trabajo en la descripción de los vericuetos psicológicos de un hombre normal, de un matrimonio normal, de una familia normal y nos hace creíble todo lo que ocurre en la novela con un estilo sencillo, que mezcla partes llenas de humor con otras irónicas y más oscuras, que consigue atrapar al lector desde el principio.
Además de García Márquez y Valle-Inclán, encuentro un débito importante a Kafka ya desde el título, donde se pretende condensar todo el argumento. Y también, y entre muchos otros ecos literarios, creo detectar a Graham Greene, a Cela, a James Joyce, a Dostoyevski y a Tolstoi, que apostaron en su obra por la osadía y la conciencia.
El desarrollo de la historia recuerda en muchos momentos el estilo y los esquemas narrativos del lenguaje cinematográfico y a lo largo de la novela encontramos inteligentes juegos literarios, la literatura dentro de la literatura, con claros tintes autobiográficos por parte del autor.
El jurado del Premio Café Gijón destacó la «audacia narrativa» de esta obra de Rafael Balanzá, «cuya trama se sustenta en una estructura muy bien construida que mantiene en vilo al lector, llevándolo a un desenlace ingenioso e inesperado». Es sencillamente la historia de dos amigos que se reencuentran. Y en ese reencuentro uno amenaza de muerte al otro; asesinos lentos porque ponen la amenaza en la mesa pronto, pero tardan en ejecutarla. Entre tanto, los amigos se emborrachan y viven una serie de circunstancias que dan cuerpo a la novela.
En definitiva nos enfrentamos (en el terreno literario de una novela negra “sui generis”) a los miedos de la vida, de la propia existencia. Huir de ellos, de nuestros miedos, es un intento infructuoso del ser humano. Lo hemos pretendido siempre y seguimos y seguiremos sin conseguirlo. El hombre nunca superará sus miedos, por mucho que lo intente, por muy convencido que esté. Porque ciertamente sólo lograremos ser felices en ausencia del miedo.
domingo, 25 de abril de 2010
Adonáis en Cáceres
Son tres buenos poetas, jóvenes además (1980, 1976 y 1975 respectivamente) que han dado a este premio un baño de luz y de cercanía que desde hace tiempo no me llegaba. Enhorabuena a los tres Adonáis y a nosotros, sus lectores.