Es lo que siento en este momento en el que me entero de que el Consejo General del Poder Judicial suspende cautelarmente de sus funciones al juez Baltasar Garzón y aplazan su salida al Tribunal Penal de La Haya. Vergüenza y asco por esta justicia vengativa y politizada. Mi solidaridad, mi apoyo y mi abrazo para este hombre tranquilo e inocente.