domingo, 13 de abril de 2008

No llueve eternamente

Me gusta esto del blog porque leo y aprendo mucho, sobre todo de los amigos. Pero hay veces que siento verdadera lástima por algunas de sus reflexiones, que quedan ahí como metáforas de posos que no huelen bien, de heridas que no dejamos cicatrizar y seguimos nosotros mismos haciendo que sangren. Aprovechemos los momentos y las palabras. Seguro que nos sentimos mejor y llevamos al menos con una sonrisa nuestros defectos y temores.
Algo en referencia a esto ha dejado escrito mi querido Antonio Colinas al final de uno de sus grandes poemas:
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Todo dura en la vida y es eterno
mientras el hombre no interprete o cante.
Para aquél que ha soñado intensamente
arde el mundo y se agota.
Siente la savia y siente la ceniza
aquél que osa hablar con el Misterio.
Llamas negras se escapan del cerco de los labios.
Y son los labios urnas en la noche.
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