Acabo de dar por concluido un libro en el que llevo trabajando ya algunos años. Una publicación especial por tratarse de la historia de Montánchez, de mi pueblo. Nunca pensé que pudiera terminarlo pero se estaba convirtiendo en una obligación moral.
Cuando pongo el punto y final a mi pequeña introducción y a los agradecimientos me emociona acordarme de los que estuvieron a mi lado cuando todo esto empezó y que tristemente ahora no están. Sé que he seguido la senda que me dejaron marcada los que me antecedieron en esta hermosa tarea de hablar de tus orígenes y me siento satisfecho y tranquilo.
El libro ya va camino de la imprenta y los primeros jueces han sido benévolos. Ojalá que los futuros lectores sepan abrazarlo con ojos bondadosos.