lunes, 12 de febrero de 2007

Profecía

Mi amigo Fermín Liberal, poeta en la niebla, me dedicó hace algún tiempo un buen poema y me lo regaló. Ahora estoy releyéndolo. No sólo aparezco en la dedicatoria sino que en sus versos se perfila nuestra amistad y nuestro común delirio por la poesía. Se titula "Profecía" y habla del destino, de ángeles y abrazos. Saldrá publicado en unos días:
-
[...]
el silencio
se despojó de su hábito entre mis dedos
tal vez ya para siempre,
y fue entonces que cesó la lluvia;
y fue entonces que desapareció el miedo;
y fue entonces que llegaste,
porque así estaba escrito
[...]
-
Es hermoso que alguien te dedique un texto y encima cuente en él sus impresiones sobre ti; nunca lo había pensado hasta hoy. Dedico algunos de mis poemas a las personas que dan sentido a casi todo lo que yo hago o lo que yo soy, pero recibir este mismo regalo es una sensación extraña, placentera, satisfactoria, casi como cuando descubrimos algo nuevo cuando niños y no tenemos palabras para explicar lo mágico del momento. Gracias amigo Fermín, sabes que confío en ti; dichosa ventura por los caminos literarios.
A ti, mi vida, decirte que cuando apareces tú en lo que escribo no quiero que me des las gracias; mi deuda la tengo yo contigo... Para toda la eternidad.